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Queda poco tiempo para el comienzo de la primavera, es hora de empezar la gran limpieza y limpiar la casa de arriba abajo
Si el panorama es sombrío y ya estás agotado sólo de pensarlo, la limpieza de primavera es una oportunidad para desahogarte y darle un lavado de cara a tu casa.
La gran limpieza
Limpieza de primavera es una expresión que todos hemos utilizado alguna vez sin saber muy bien de dónde viene. De hecho, es una tradición que se remonta a la época en que los agricultores tenían que vaciar sus graneros para hacer sitio a las nuevas cosechas. Esta limpieza solía realizarse al final del invierno, antes de la vuelta del calor.
Hoy en día, esta tendencia continúa y hace referencia a la gran limpieza que se realiza cada año.
Tras meses de casi hibernación, la suciedad se ha instalado por todas partes. Así que es hora de convertirse en un hada doméstica y limpiar toda la casa.
Aquí tienes nuestros consejos para hacerlo de forma eficaz y que todo quede reluciente.
Haz una lista de tareas
Antes de empezar la limpieza de primavera, tendrás que organizarte con antelación. Por supuesto, puedes pedir a toda la familia que se encargue de algunas de las tareas y hacer una lista para todos.
Hacer una lista de todo lo que tiene que hacer evitará que te olvides de cosas y, sobre todo, te permitirá saber exactamente en qué punto te encuentra, marcando cada paso a medida que lo vayas completando.
Pon música antes de empezar la gran limpieza
Para sentirte a gusto durante la limpieza de primavera, pon música que te ponga de buen humor. Elige sonidos que te gusten y te hagan sentir bien. Elige un atuendo cómodo y ponte en marcha.
Prepara tus productos de limpieza
Puedes elegir entre comprar productos de limpieza ecológicos o fabricar los tuyos propios. La lista de productos eficaces para limpiar toda la casa incluye bicarbonato de sodio, vinagre blanco y, por supuesto, agua.
Por supuesto, necesitarás tu aspiradora, un cubo, un cepillo, un paño de microfibra, mucho más eficaz en superficies lisas, un par de guantes domésticos y una mascarilla antipolvo.
Limpieza de habitación por habitación
Organización es la palabra clave cuando empiezas una limpieza de primavera. Para evitar perderte y acabar en un lío desconcertante, debes avanzar habitación por habitación. Cocina, baño, salón, cada habitación debe limpiarse adecuadamente.
Dormitorios
En cada uno de los dormitorios, tendrás que ordenar los armarios y cajones. Es el momento de deshacerte de la ropa que ya no usas y regalarla o venderla. Lo mismo ocurre con los juguetes y todas esas pequeñas cosas que ocupan espacio sin ser utilizados.
La ropa de invierno habrá que meterla en la lavadora o enviarla a la tintorería para que espere al próximo invierno.
Por último, tendrás que cambiar las sábanas, dar la vuelta a los colchones, quitar el polvo de los muebles y pasar la aspiradora por todos los rincones.
Cocina
En la cocina, la tarea será compleja. Además de limpiar de arriba abajo los armarios, estantes de pared y organizar mejor el espacio de almacenamiento, tendrás que pensar en el frigorífico. Es hora de descongelarlo, hacer inventario de lo que contiene y darle una limpieza a fondo para eliminar los restos de comida y las bacterias. No olvides quitar el polvo de la parte superior de los armarios, limpiar la campana extractora y el horno.
Salón
El salón es el lugar donde es más probable que limpie. Y, sin embargo, los muebles de madera necesitan un mantenimiento para conservar su mejor aspecto.
Existen muchos consejos y trucos para reavivar la madera y reducir el impacto del polvo sobre ella. Uno de los más eficaces es utilizar una mezcla de aceite de oliva, vinagre blanco y detergente líquido en un pulverizador. También puedes utilizar una cera especial para madera que la mantendrá brillante durante mucho tiempo.
En cuanto a los muebles del salón, deberías pensar en limpiar la parte inferior de sus sofás y sillones. Aquí es donde se guardan las migas de pan y otros residuos, pero también el pelo si tienes animales domésticos.
Uno de los mejores consejos para tratar el pelo es ponerse un guante de goma y deslizarlo por la superficie para que se pegue.
El cuarto de baño
En el cuarto de baño, la pesadilla definitiva son las juntas. Para blanquearlas y devolver el brillo a tus azulejos, sólo tienes que seguir un sencillo paso.
Mezcla bicarbonato sódico y vinagre blanco en un pulverizador y rocíalo por toda la superficie. Déjalo actuar unas dos horas mientras trabajas en otra tarea y acláralo con agua limpia o límpialo con un paño.
El vinagre blanco también es muy eficaz para los grifos, ya que los hace brillar y les devuelve su antiguo lustre. Las duchas y otros grifos deben sumergirse en vinagre blanco durante unas horas para eliminar toda la cal y la suciedad. Utiliza bolsas de congelación con gomas elásticas para facilitar el proceso.
