Reducir huella de carbono

Una huella de carbono es la cantidad de CO2 (el metano, el óxido nitroso y otros gases de efecto invernadero también se convierten en dióxido de carbono mediante fórmulas especiales) que ingresa a la atmósfera debido a su actividad.

 Huella de carbono

Huella de carbono: es un conjunto de emisiones de todos los gases de efecto invernadero producidos por una persona, organización, evento, producto, ciudad, estado, directa o indirectamente. Se mide por unidad: kg / kWh de dióxido de carbono (CO2) y se puede calcular tanto para organizaciones y empresas, como para cada persona de forma individual. La huella de carbono es parte de la huella ambiental global.

Muchas actividades contribuyen a la rápida formación de gases de efecto invernadero en la atmósfera, por ejemplo:

• Quema de combustibles fósiles.
• Extracción de recursos.
• El uso de vehículos equipados con motores de gasolina y diesel.
• Producción de bienes diversos y otros.

Los procesos productivos y domésticos relacionados con la combustión de combustibles fósiles afectan directamente al medio ambiente: el uso de un automóvil personal, robos frecuentes, consumo descontrolado de diversos recursos se consideran fuentes directas o primarias de la huella de carbono. Las fuentes secundarias o indirectas incluyen productos comprados como alimentos, ropa, artículos para el hogar, etc., ya que en estos casos también se obtienen gases de efecto invernadero.

Los gases de efecto invernadero que ingresan a la atmósfera, incluso como consecuencia de todas estas acciones, afectan el cambio climático, que es el principal motivo del aumento del número de fenómenos hidrometeorológicos peligrosos o desastres naturales: sequías, inundaciones, etc. Estos son factores de destrucción de ecosistemas y pérdida de biodiversidad, que se escuchan casi a diario en los boletines.

Medidas para reducir la huella de carbono

Trate de usar el transporte público con más frecuencia y camine. Los gases de escape afectan en gran medida el estado del aire que respiras, por lo que incluso si tienes coche propio, es recomendable intentar viajar con más frecuencia en transporte público y, en verano, andar en bicicleta. O caminar si es posible. En las grandes ciudades existen servicios de carsharing o alquiler de coches con empresas especializadas o particulares. Este modelo es especialmente práctico si el coche solo se necesita de vez en cuando.

El desarrollo de una economía compartida es una tendencia global si no puede comprar sus propios bienes, ahorrando así mantenimiento, pero al mismo tiempo tiene acceso a ellos.

Evite vuelos frecuentes o reemplace el avión con el tren, si es posible. Esto ayudará a reducir la huella de carbono de los viajes aéreos al menos ligeramente.

Compra productos locales. Algunas frutas o verduras importadas pueden ser más sabrosas que los productos nacionales, pero la huella de carbono de su transporte es tan grande que vale la pena elegir un cultivo local.

Reducir el consumo de carne. La producción de productos cárnicos también tiene una importante huella de carbono, siendo una de las fuentes de emisión de gases metano pertenecientes al efecto invernadero a la atmósfera. En primer lugar, trate de organizar los días de ayuno, excluyendo la carne o al menos sustituyéndola por pescado. También ayudará a reducir su huella de carbono.

Ahorre energía de cualquier forma. Usando electrodomésticos de manera racional, reemplazando las lámparas eléctricas ordinarias con lámparas de ahorro de energía, sin dejar que los electrodomésticos se carguen por la noche, la computadora se puede recargar en modo de espera, apague las luces al salir de la habitación. Ahorre agua, porque la calefacción y el bombeo requieren mucha energía.

Consumo responsable. Eliminar las compras espontáneas, sin tirar cosas si simplemente han dejado de gustarles y plantearse otras alternativas: regalar, canjear o vender. Los botes de basura no deben llenarse con artículos que de repente se vuelven desagradables o pasados ​​de moda, ya que podrían ser útiles para otra persona. Y para los artículos en mal estado, se pueden asignar a puntos de recolección especiales para su posterior procesamiento. Es recomendable acudir siempre a la tienda con listado, evitando así compras innecesarias. Pasar al consumo responsable significa elegir lo que realmente se necesita y utilizar cada vez más activamente los servicios de consumo compartido más populares.

Deje de financiar negocios no ambientales. Si se sabe que la empresa ignora los problemas ambientales y comete actos poco éticos con la naturaleza, simplemente evite consumir sus productos. Puede haber otras opciones.

Compensación de la huella de carbono

La huella de carbono no solo se puede reducir, sino también compensar mediante la plantación de árboles. Lo primero que hay que hacer es calcular la huella de carbono online, donde se ubican todos los valores conocidos: uso del transporte público, número de viajes aéreos, consumo de gas o combustible (diésel), consumo de electricidad, etc.

Este cálculo se basará en datos sobre el consumo de energía y otros recursos. La calculadora no solo mostrará la cantidad de dióxido de carbono emitido a la atmósfera, sino que también calculará la cantidad de árboles que se plantarán para compensar las emisiones. Con la ayuda del servicio, cualquiera puede plantar un árbol sin salir de casa.

Los voluntarios plantan árboles en las zonas forestales afectadas de diferentes regiones. Los bosques locales preparan la tierra para la siembra y también se encargan del seguimiento de las plantaciones. Después de plantar, los participantes en el programa de compensación de la huella de carbono comparten fotos y coordenadas GPS de las plantaciones.

No es difícil introducir hábitos ambientales en la vida, lo principal es empezar a hacerlos. Es importante recordar que incluso las acciones más simples pueden conducir a un cambio global. Pero estos cambios dependen de las acciones que se empiecen a tomar personalmente.